Propiedades medicinales de las infusiones más comunes

Las infusiones constituyen una forma muy práctica de aprovechar los beneficios medicinales de muchas plantas. Aunque no son medicamentos, las infusiones más comunes proporcionan beneficios para nuestra salud. Manzanilla: Es una de las infusiones más empleadas en el mundo, tanto como bebida como aplicándola directamente sobre la parte afectada. Está indicada en caso trastornos digestivos leves, como diarrea, gastritis, indigestión o cólicos. También es muy utilizada  en caso de irritaciones o inflamaciones oculares (hervida y dejada enfriar). Puede ser útil en caso de afecciones respiratorias y para limpiar heridas superficiales o tratar el acné. Poleo-Menta: Su principal propiedad es optimizar las funciones digestivas Tiene propiedades antiespasmódicas, antisépticas, así como para reducir la flatulencia, y ayuda a realizar digestiones pesadas. Se emplea también para catarros y tos. La planta también usa para ahuyentar los insectos de los cultivos. Tilo:  La parte medicinal se encuentra en sus flores y frutos que contienen farmesol y proporcionan un olor agradable. Debido a sus capacidades sedantes es frecuente emplearla como tranquilizante, para calmar el estado nervioso. Además, ayuda a realizar la digestión y a dormir con facilidad. Aunque esa es su principal función también se emplea para reducir los problemas coronarios y arteriales, así como para cólicos y reducción de las irregularidades menstruales. Valeriana: Al igual que la tila, esta hierba actúa contra el nerviosismo, como sedante y relajante. Sin embargo, debe ser administrada con precaución, ya que puede dar lugar a la excesiva sedación del sistema nervioso, así como al retardo de la circulación y el descenso de la presión arterial. En el siglo XVI se conoció su capacidad para controlar la epilepsia. Anís Verde: España es uno de los principales productores de esta hierba. Sus propiedades expectorantes, como tónico estomacal y digestivo la convierten en una de las plantas medicinales más utilizadas. También tiene la propiedad de regular las funciones menstruales, así como de aliviar la flatulencia. No es soluble en agua. Para prepararlo es necesario verter en el agua algún tipo de anisado ya preparado. Romero: Desde la antigüedad se ha utilizado con fines curativos del sistema nervioso. Su aroma tiene la capacidad de reforzar la memoria y de mejorar la circulación. Otro día os hablaremos de las  propiedades de los diferentes tés.