Menta para tus platos y bebidas
Menta, hierbabuena, con fragancia de chocolate, más grande o más carnosa… mentas hay decenas. Lo normal es encontrar uno o máximo dos tipos en el garden. Para empezar recomiendo no volverse loco buscando variedades, elige las dos que más te gusten (por semilla crece muy lenta), pregunta que sea apta para el consumo, que no ha sido tratada en los últimos 30 días (si no estás seguro, guarda 15 días de margen en tu casa).No hace falta comprar un ejemplar grande, con 20 cm. de altura está bien. Igualmente es barata, así que cómo lo sientas en el momento. Se desarrolla muy rápido y es invasora así que ten en cuenta un par de detalles: Si las plantas en maceta, intenta que ésta sea larga o con bastante superficie y entre 15-25 cm. de profundidad. Colócalas separadas; si las plantas en suelo, hazle un perímetro que delimite hasta dónde quieres que llegue o se extenderá hacia todas partes invadiendo el terreno; Ganaremos muchos puntos si el sustrato es rico en nutrientes y cada mes le aportamos abono. Recuerda regarla cuando la plantes. A partir de ahí necesitarás regarla con cierta frecuencia, verás que ella misma te lo muestra. El agua que utilices es mejor que sea sin cal, o sea de botella o filtrada. Si usas agua del grifo no filtrada intenta hacerle un riego de regalo cada mes con agua de su gusto. Si llueve deja que se moje bien, le encanta. Intenta mantener una humedad ambiental media-alta. Prefiere sol y sombra pero incluso en sol o en sombra crecerá. Si en invierno no aguanta el frío y pierde la parte aérea, corta a 1 cm del suelo y cúbrela con paja o algún material que la proteja del frío, en primavera renacerá. A nivel culinario es una planta polivalente, puede aromatizar sopas, caldos, arroces, pescados, carnes, quesos… también podemos usarla bien picada en ensaladas, en cous cous o para decorar y realzar postres. Es muy conocido su uso en infusiones. Podemos introducirla en nuestras bebidas como limonadas, zumos, refrescos o para elaborar un refrescante mojito. Para sacarle todo su potencial: pon una cucharada de azúcar, un chorrito de limón, las hojas de menta y machácalas sin romper la hoja; Conseguirás sacarle el jugo y saborearla al máximo. Yo le añadiría hielo, un poco más de limón y soda, perfecto refresco de verano. Su uso medicinal es habitual para mejorar la digestión y cuidar el intestino, como antiespasmódica y carminativa, para tratar la tos y resfriados, y por su función antiséptica y anestésica. Como siempre, no se debe abusar y hay que tener especial cuidado con los aceites esenciales. fuente: Suplemento Gastronómico Gourmet's
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Vitaminas y Minerales
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