Feng Shui, un arte milenario para recuperar el sueño
- Es fundamental que mantengamos nuestro dormitorio limpio y recogido, sin ropa a la vista y con la cama hecha. El desorden provoca la pérdida del equilibrio.
- La cama debemos ubicarla alejada de la puerta y nunca en línea recta con ella.
- Debemos evitar colocar espejos frente a ella, el reflejo de nuestra imagen, podría provocarnos sueños agitados, lo cual perjudicaría a nuestro descanso.
- Debemos prescindir, en la medida de lo posible, de aparatos eléctricos.
- Nunca debemos colocar sobre la cabecera de nuestra cama: cuadros, estanterías o espejos, romperían la armonía de la habitación.
- No apoyaremos la cama en la pared colindante a un cuarto de baño.
- Evitaremos colocar la cama bajo un techo con vigas. Tampoco debemos colocar objetos debajo de la cama como por ejemplo: cajas, zapatos, etc.
- En la medida de lo posible, evitaremos poner ventiladores de techo sobre la cama.
- La cama es la pieza clave en la habitación, por tanto, hay que disponer los demás muebles alrededor de ella.
- Mientras dormimos es importante que los armarios siempre estén cerrados. En cuanto al mobiliario, es mejor que nos decantemos por muebles de líneas curvas, la suavidad de las líneas redondeadas ayuda a crear un ambiente más tranquilo.
- Finalmente, en cuanto a la iluminación, las lámparas deben proporcionar una luz suave y lo ideal es que podamos graduar su intensidad para crear la atmósfera adecuada.
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Familia
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