Aunque todos los tés proceden de la Camellia Sinensis, según el tratamiento que se les da tienen diferentes propiedades y beneficios.
Té Verde:
Es útil para reducir el nivel de colesterol, perder peso, desintoxicar y depurar activando el metabolismo del hígado. Destaca su contenido en antioxidantes. La gran cantidad de fluoruro ayuda a fortalecer huesos y dientes, y por lo tanto, a reducir su caída. Tiene potencial para la lucha contra el cáncer de piel, estómago, esófago y colon así como poder para regular el azúcar en sangre y los niveles de insulina. Para conseguir sus antioxidantes se debe dejar 10 minutos en remojo. Es mejor tomarlo fuera de las comidas.
Té Rojo:
Es ideal para reforzar el sistema inmunitario, reducir el colesterol, eliminar la celulitis por cúmulo de líquidos y prevenir enfermedades del corazón.
Se recomienda su consuma a medio día en las comidas y a media tarde.
- Oolong: Se considera efectivo en la lucha contra el cáncer, debido a su capacidad de ayudar a células a reproducirse con exactitud. Reduce los niveles de colesterol malo y la presión arterial. Es antioxidante, digestivo, aumenta las defensas inmunitarias e hipoglicemiante (reduce el azúcar en la sangre). Contiene muchas vitaminas y minerales y se le atribuye el poder de disolver las grasas.
- Pu-erh: En China está asociado a un té medicinal que suele consumirse después de comidas pesadas para facilitar la digestión y como remedio contra la resaca, ya que aumenta el metabolismo del hígado. Actualmente es muy popular debido a sus propiedades para eliminar grasa, por lo que ha alcanzado a tener el nombre de “devorador de grasas”. Contiene muy poca cafeína.
Té Negro:
Las variedades negras incluyen Ceilán, Assam, y Darjeeling. De sabor intenso, tiene un índice de cafeína mucho más elevado que los otros tés y por ello tiene una acción estimulante que ayuda a combatir el cansancio.
El sistema cardiovascular es uno de los más beneficiados gracias al efecto antioxidante. Mejora la capacidad de dilatación y contracción de los vasos sanguíneos lo cual puede reducir el riesgo de ataques cardiacos. Su aporte de flúor colabora en la prevención de las caries dentales. Ayuda a la digestión. Se recomienda su consumo en el desayuno y a media tarde.
Té Blanco:
Conocido como yinzhen que quiere decir “aguja de plata”. Es el que menos contenido de cafeína posee, y a su vez concentra mayor cantidad de sustancias antioxidantes. Ayuda a combatir el envejecimiento de la piel, estimular las defensas del organismo, aliviar la menopausia. Es diurético, combate la fatiga física y mental, aumenta la capacidad de concentración y memoria, favorece la eliminación de grasas, reduce los niveles de colesterol.
A nivel externo se utiliza en casos de conjuntivitis o vista cansada (se aplica haciendo un baño o a modo de colirio). También puede disminuir las bolsas de debajo de los ojos aplicándolo en forma de compresas frías. Se puede consumir durante todo el día.
Deja un comentario