Cuando hablamos de abdominales, la primera imagen que nos viene a la mente es la de una mujer tumbada boca arriba, con las piernas flexionadas y los pies apoyados sobre el suelo, elevando la cabeza y los hombros para aproximarlos a las piernas. ¿Quién no los ha hecho alguna vez? Sobre todo con vistas al verano. Sin embargo, los abdominales “tradicionales” están muy lejos de ser beneficiosos para la fisionomía femenina. Este movimiento implica una fuerte contracción de los músculos...